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La empresa cordobesa Akron cerró 2025 con un hito para su estrategia internacional: concretó la primera partida de maquinaria agrícola producida en Estados Unidos y destinada directamente a ese mercado. La embolsadora de granos fue la primera máquina que se fabricó.
Según destacaron desde la firma, este paso forma parte de un plan de crecimiento a tres años que busca ampliar la línea de equipos “Made in USA”.
La puesta en marcha de la producción en territorio estadounidense se logró a partir del trabajo conjunto entre equipos de ambos países, donde Akron terceriza la producción. Técnicos y especialistas de la firma viajaron de manera permanente para validar los modelos, transferir conocimiento y optimizar procesos, aportando tecnología y experiencia desarrollada en Argentina a una operación pensada para competir en uno de los mercados más exigentes del agro mundial, explicaron en un comunicado desde la empresa oriunda de San Francisco.
Además, buscan y consolidar la presencia global de la marca argentina, que desde 2003 exporta a más de 30 países. Canadá, Estados Unidos, Australia, Sudáfrica y los países limítrofes (Uruguay, Paraguay y Chile) son los mercados más importantes. Este año un 32% de la producción que se fabricó se fue para el mercado externo, pero han tenido años que ha estado por encima del 40%.
Con esta apuesta industrial, la compañía afirma que profundiza su identidad global sin descuidar el negocio interno. En 2025, el mercado argentino mostró un mayor dinamismo y una demanda creciente de tecnologías de alta performance, escenario en el que Akron fortaleció su red comercial
La empresa también sostuvo su estrategia de oferta integral, que combina equipamiento Akron con tractores japoneses Kubota, drones agrícolas DJI y maquinaria vial y palas cargadoras Terraplane, acompañados por un servicio técnico y provisión de repuestos las 24 horas, un diferencial que la firma considera clave en su desempeño local.
De cara a 2026, la empresa proyecta un escenario favorable, apoyado por buenas perspectivas para la cosecha, precios firmes en ganadería y lechería y un menú financiero más competitivo.
En ese contexto, la expansión industrial en Estados Unidos aparece como uno de los motores para una nueva etapa de crecimiento, con el objetivo de seguir invirtiendo, innovando y llevando tecnología argentina al mundo.
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