El Banco Central de la República Argentina (BCRA) oficializó este jueves medidas clave para restringir la liquidez de la economía a través de modificaciones en la política de encajes para los bancos hasta fin de año. La autoridad monetaria busca facilitar la licitación del Ministerio de Economía, prevista para el próximo lunes, tras el bajo nivel de renovación de deuda registrado este miércoles, pese a la reciente suba de tasas de interés.
El propósito es evitar nuevas presiones sobre el dólar en un escenario preelectoral. El tipo de cambio retrocedió en las últimas semanas respecto a los máximos que había tocado a finales de julio, pero los analistas señalan que esa dinámica se da a costa de tasas más altas que pueden tener impacto en la actividad económica.
La Comunicación “A 8302” del BCRA introduce cambios sensibles en las normas que regulan la liquidez bancaria. Según fuentes oficiales consultadas por Infobae, destacan tres ejes principales: se incrementan los encajes, permitiendo que puedan integrarse con títulos públicos adjudicados a partir de la subasta del lunes; la medición de esos encajes pasa de un promedio mensual a un cómputo diario, mucho más restrictivo; y se duplica la penalización para las entidades financieras que no cumplan con las regulaciones del BCRA.
Hasta este jueves, los bancos estaban obligados a mantener encajado un 45% de sus depósitos, y 5 puntos de ese porcentaje podían cubrirse con deuda del Tesoro. Ahora, el encaje sube a 50%; los 5 puntos adicionales solo se podrán integrar con títulos licitados en la subasta del próximo lunes.
A la vez, el cálculo de los encajes, antes basado en un promedio mensual, se realizará enforma diariade ahora en adelante. Desde el BCRA explicaron: “Esto facilita el seguimiento de la liquidez de la economía”. Esta nueva modalidad reduce el margen de maniobra de los bancos y agrega una mayor rigidez al mercado del peso argentino.
El tercer eje de la reforma es el endurecimiento de las penalidades. Hasta esta medida, el incumplimiento del nivel de encajes o del límite de tenencias en moneda extranjera se sancionaba con una multa equivalente a 1,5 veces la tasa TAMAR mayorista (actualmente en 49,75% TNA). Desde ahora, la penalización asciende a tres veces la tasa TAMAR, lo que duplica el castigo para los bancos incumplidores.
El economista Gabriel Caamaño consideró que las medidas implican forzar el financiamiento del Tesoro a partir del endurecimiento de la política monetaria, mientras que anticipó continuidad en la volatilidad de tasas y baja del tipo de cambio. “La vuelta del crowding out se consuma con demanda regulada canalizada a títulos que vencen después de las elecciones”, sintetizó.
Estas disposiciones del BCRA llegan después de una licitación del Tesoro que dejó como saldo una cantidad considerable de pesos fuera del sistema, incluso con tasas que duplican la inflación mensual. Este escenario exigió al equipo económico del presidente Javier Milei a acelerar una subasta extraordinaria programada para el lunes. El bajo nivel de renovación de solo el 60% de los vencimientos de Lecaps y otros instrumentos en moneda local dejó fuera de circulación unos 5,7 billones de pesos.
Para los analistas, la medida era previsible: los bancos —principales tenedores de títulos del Ministerio de Economía— necesitaban hacerse de pesos rápidamente para cumplir con la anterior suba de encajes oficializada en julio por la autoridad monetaria.
El miércoles por la noche, Federico Furiase, director del BCRA y asesor del ministro de Economía Luis Caputo, anticipó en su cuenta de X una nueva licitación de letras y bonos en pesos, fuera del calendario habitual. También adelantó, aunque sin confirmación oficial del Ejecutivo, que se alteraría el esquema de encajes para que los bancos pudieran computar parte de estos con títulos públicos. La Comunicación “A 8302” confirmó esas expectativas y aporta claridad al sector financiero.
El Secretario de Finanzas Pablo Quirno anunció, minutos después de publicadas las medidas del BCRA, una licitación fuera de calendario para el lunes 18 de agosto. El Tesoro ofrecerá títulos ajustados a la tasa TAMAR, con vencimiento el 28 de noviembre, destinados exclusivamente a bancos y solo para cartera propia.